Pues ésta es nuestra realidad, la realidad de nuestro Estado, de nuestra Patria, de NUESTRO PAIS.
Somos un mosaico de comunidades (sin olvidadrnos de las ciudades autónomas) amparados todos bajo nuestra bandera, madre y soporte de todos.
Nuestra cultura, nuestro fundamento, nuestra historia habla de una gran Nación, que fue, es y será y también habla de rasgos específicos de cada región, con nombre propio pero nunca por encima de España y es que, pese a quien pese, todos los españoles, de las 17 Comunidades Autónomas, más Ceuta y Melilla tenemos los mismos derechos y debres, nos ampara la misma Constitución y podemos ejercer nuestro derecho al voto de las Cortes y el Parlamento (me resulta curioso que aquellos nacionalistas que se sienten diferentes luego acudan a las urnas a votar a su representante ante todos los Españoles, pero aún me hace mas gracia que esos representantes independentistas se presenten a las elecciones generales...¿no les parece muy poco consecuente?) En definitiva, TODOS SOMOS ESPAÑOLES, para lo bueno y lo malo (para ganar la eurocopa todos a una y para soportar la crisis y la decadencia a la que el Sr ZParo nos arrastra cada día)
El caso es que en este puente de la Hispanidad me he recorrido unas pocas tierras de nuestra España y he podido ver una imagen que no me ha dejado indiferente, una imagen preocupante, o mejor dicho, imágenes muy contrastadas, de la alegría por la celebración del día de todos al pesar y la tristeza de aquellas personas que se ven forzadas a la mendicidad en cualquier esquina.
Iremos por partes
Era impresionante ver el domingo a la noche el paseo del Prado cortado hasta Cibeles y luego Alcalá hasta Retiro y pararte en medio de la calle a ver el desfile hispano, con miles de banderas ondeando, hispanas y españolas y una gran cantidad de público acompañando y festejando la víspera del día de la HISPANIDAD, porque es para sentirse orgulloso el hecho de que el día de nuestra Nación no solo se quede en nuestro país, sino que todos los paises de habla hispana lo compartan y celebren junto a nosotros, recordando que una vez fueron españoles y que nuestras raices y nuestra cultura siguen creciendo fecundas.
Y creanme al decirles que fue complicado ciertamente encontrar alojamiento para aquella noche y esque, como decía el cubano dueño del hostal, este fin de semana viene mucha gente de todas partes a celebrar el día de España. Y vaya que sí, Madrid estaba hasta la bandera y ayer, encontrar un sitio para poder ver el desfile era un acto impensable para aquellos que, como yo, madrugamos poquito.
Y resulta que durante el acto, antes y depués, se escucharon pitos y abucheos al señor Zapatero y se ha levantado una polémica sobre si era el momento correcto o no para ellos, pero ¿no creen que es el pueblo el que debe hablar y es precisamente en un día como el de la hispanidad, en el que nos encontramos muy poco representados por éste Señor? Aquel que apoya a las minorías porque son las únicas que le escuchan, el único que negocia con los separatistas e independentistas, que no defiende nuestras señas nacionales y que no escucha los gritos del pueblo español que cada día tiene menos medios para subsistir y a los que ahoga con la subida de impuestos que graban los productos del carro de la compra, ¿no es en todo caso el pueblo soberano el que paga el trabajo que debería hacer el Sr Zapatero, el que tiene potestad para colocarlo o quitarlo al frente del Estado Español? Pues que el pueblo hable y se manifieste, porque España es libre y libres los españoles para expresarse.
Hoy me salgo de mi tierra, en la que cada mañana veo las largas filas del paro a la puerta de mi casa y dejo aquí mi sensación del fin de semana largo, tras pasear por el Euscadi, por Castilla y Leon y por Madrid puedo asegurar que vi a muchos más mendigos, gente pobre en las calles, gente honrada, bien vestida, pidiendo una ayuda porque no llega a final de mes. Señores ancianos cantando coplillas en la calle para tener algun euro, gitanillas bailando al son del cajón, jovenes y niños en la puerta de locales de comida rápida, rebuscando en la basura...y me pregunto ¿qué está pasando? ¿Nos merecemos los españoles esta presión y esta decadencia? En cierto modo somos los responsables al dejar en la poltrona a este gobierno socialista, pero nadie, ninguno de nosotros, españoles, nos merecemos tan alto precio.
La vida de una persona está por encima de todo y el gobierno socialista no quiere verlo y se mete más en circunloquios para romper la identidad de nuestro país que en los verdaderos problemas de los españoles y es que nadie, ninguno de nosotros está pasando por alto la crisis.
No se cómo ni cuando pasará todo este temporal, pero Zapatero no nos convence a los españoles, porque no nos escucha y menos aun nos atiende por eso opino que es lícito que en la Fiesta Nacional Zapatero escuchara bien alto:
DIMISION!!!!!
Porque es el sentimiento del pueblo español, aquel que le ha colocado donde está y que hoy, ya, no queremos.
Zapatero NO NOS GUSTA
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